Vivos n º 6
Juan Pedro, en el jardín de la Casa Parroquial de Aljucer
Hoy os presentamos a Juan Pedro, una persona muy conocida en Aljucer. Ha sido tan amable de contarnos algo sobre su vida y de compartir su visión sobre Aljucer.
Nació el 10 de diciembre de 1944 en su casa, en la Carretera de El Palmar, en donde vivía su familia.
Su padre era Juan Fernández Martínez. Tuvo que participar en la Guerra Civil. Antes de ir a la guerra, Juan, desde los 16 años, se dedicaba a ser barbero, de ahí su apodo. Cuando volvió de la guerra, se dedicó a las harinas y los piensos.
Sus abuelos paternos eran Victoriano Fernández Frutos, que se dedicaba a las tareas agrícolas, y Eloísa Martínez González.
Su madre se llamaba Dolores López Almagro, de la calle de la Cruz, hija de Pedro López Méndez, conocido por "El Comino", que era cabrero, sabía tocar muy bien la guitarra y que murió a los 33 años; y de Tomasa Almagro Mompeán, conocida como la "Tía Tomasa de la Calle de la Cruz".
Juan Pedro fue el 3 º de cuatro hijos. Sus hermanos, Victoriano, Pedro (que murió siendo niño) y María Luisa.
Fue a la escuela de Francisco Sánchez Matas, en la Carretera de El Palmar, adonde iban como unos cien niños. Allí hizo hasta cuarto.
A los 10 años empezó a estudiar en la Academia Herma, vinculada a Francisco Sánchez Matas, en la calle Mateos del Barrio del Carmen. Allí estudió hasta 4 º de Bachiller, del que se examinó en el antiguo Instituto Alfonso X, actual Cascales.
Posteriormente estudió el Bachiller Superior en la Academia de Juan José Franco Almagro, catedrático de Matemáticas del Instituto Alfonso X de Murcia y sobrino del aljucereño Beato Canuto, por su rama paterna. Por su rama materna, Juan José era sobrino de la su abuela Tomasa.
Tras la guerra, su padre compró el molino eléctrico de 2 piedras de Pepe Galera, en la calle Vereda, en donde ahora está la pescadería, sobre la acequia de Alguazas, lindando con el cauce de la Acequia Mayor de Barreras. Allí se molía de todo tipo de pienso, de cebada, de maíz, de trigo...
Juan Pedro le echaba una mano a su padre en el trabajo del molino.
En 1963, a los 18 años, Juan Pedro se presenta a las oposiciones al Banco Exterior de España y las aprueba.
Desde entonces comienza una serie de destinos que le llevan a Sevilla durante 5 años, a Orihuela durante 9 años, y en Murcia hasta la fecha de su pre jubilación.
El 5 de mayo de 1973 se casó con Isabel Ruiz Pedreño en la Iglesia de Aljucer, de cuyo matrimonio han nacido 3 hombres, Alfonso, Salvador y Pedro Jesús.
Juan Pedro es una persona inquieta que ha tenido varias aficiones.
Le gusta mucho el cine, la lectura y la pintura, (tanto disfrutarla como crearla).
Durante un tiempo practicó su afición a la taxidermia, gracias a un curso a distancia que hizo por el Instituto Jungla de Madrid.
Sobre esta curiosa afición, nos cuenta que, sobre todo, disecaba aves y algún mamífero pequeño o parte de él.
De hecho, nos cuenta que, uno de sus tíos maternos, José López Almagro, marido de Carmen González Ortega, tenía una carnicería en la calle de la Cruz. A veces le proporcionaba cuernos y patas para hacer perchas, o también pieles.
Otra de las aficiones de Juan Pedro es viajar. Ha ido a Francia, Portugal e Italia, y se ha recorrido toda España excepto Santander, Asturias y Jaén.
Por otro lado, el teatro ha sido su gran pasión. "Me encanta", nos confiesa.
En principio empezó a hacer de ayudante de dirección en un grupo de teatro que se formó en la parroquia cuando estuvo de cura D. Alfonso Ortiz. Pero días antes de actuación, al artista principal le entró miedo escénico y le tocó actuar.
Hicieron varias obras de teatro: "La herida luminosa", que representaron unas 30 veces, en especial por el Campo de Cartagena. También "La barca sin pescador" o "La dama del alba". La última que ensayaron pero que no representaron, debido al traslado de D. Alfonso, fue "La venganza de Don Mendo".
También ha colaborado con distintas asociaciones y con la parroquia durante muchos años.
Con respecto a Aljucer, Juan Pedro nos dice que:
"Aljucer es mi pueblo al que quiero y en el que vivo. Podría haberme ido a otro sitio a vivir y no he querido. Rechacé otros destinos para quedarme aquí"
Juan Pedro también nos dice que "los aljucereños, en general, mostramos poco interés por la cultura y la historia del pueblo. Nos implicamos poco en el bien común y en el cuidado del pueblo, cuando estamos en una zona privilegiada y tranquila. Pero valoro la hospitalidad, la generosidad y lo agradecidos que son".
Agradecemos a Juan Pedro su tiempo y su generosidad a la hora de hablarnos de él y de su vida.
Ginés Marín Iniesta