Trasfondo n º 39
Casa en venta en la Avenida de la Libertad de Aljucer
Amargura. Amargor. Impotencia.
Quizás estas palabras se acercan, si acaso, al sentimiento que nos asalta cuando paseamos por Aljucer. Es la sensación de desidia, de desinterés, lo que se encuentra en las distintas calles y plazas del pueblo.
Como sabéis, Trasfondos de Aljucer, trata de ser un álbum de fotos actual de esta localidad. Y con este trasfondo nos proponemos reflejar, de alguna forma, la crisis que estamos sufriendo, pero que, en Aljucer, tiene más edad.
La foto de Ricardo es una imagen dura. Una casa en el centro del pueblo, una casa deshabitada, en venta, rotulada con spray. Es el símbolo de un pueblo en crisis, que no da pasos, porque todo avanza y no dar pasos significa quedarse atrás.
Podéis ver muchos carteles de "Se vende", o de "Se alquila". Se ven a lo largo del pueblo. Algunas tiendas han cerrado o están a punto de cerrar. Los vecinos, insatisfechos con cientos de cosas, pero parece que poca cosa se arregla.
No sabemos si la crisis que nos atenaza es porque nos quedamos ladeados de las grandes arterias de comunicación hace 230 años, con la inauguración de la actual Carretera de El Palmar, lo que ha supuesto el aislamiento paulatino de la localidad.
No sabemos si es por la incompetencia de los gobernantes que han gobernado Aljucer a lo largo de los siglos, que no han sabido tener un proyecto de futuro, un visión a largo plazo. O por la enorme influencia de la política, en el peor sentido de la palabra, que ha sido un arma arrojadiza contra el contrario.
No sabemos si es por la actitud de los aljucereños, poco reivindicativa, poco participativa, con poco sentido de comunidad y más preocupada en las disputas internas, que en la búsqueda del bien común.
Lo que queda claro es que ahora, Aljucer, es un pueblo en crisis.
No parece haber un proyecto de pueblo a medio o largo plazo, ni siquiera a corto. No parece haber una dirección hacia la que dirigirnos. Parece que vamos a la deriva. Hay un cierto desinterés en dar participación o participar en la búsqueda de un futuro mejor como comunidad.
Hay tantas cosas por hacer que da pereza hasta pensarlo: educación, infraestructuras, infancia, juventud, fiestas, medio ambiente, tráfico, cultura, atención social, ...
Pasan las horas, los días, los meses, los años, las décadas...
Parece que nos hemos acomodado a esta situación y que forma parte de este lugar y de su identidad.
La crisis económica actual no ha hecho sino aflorar toda esa crisis que en Aljucer viene de lejos.
Estamos siendo conscientes de que hemos tenido un pasado, rico, intenso, interesante. El presente es aceptable y mejorable, pero el futuro es inquietante.
Nosotros queremos un pueblo vivo, participativo, lleno de vida, que ofrezca, no que pierda, como ahora.
A nosotros sólo nos mueve el tener un futuro mejor, que lo construyamos entre todos y en el que todos seamos partícipes y beneficiarios.
Creemos que es posible hacerlo en este presente que tenemos. Creemos que es posible no resignarse y tratar de buscar soluciones.
Creemos que este barco puede dejar de ir a la deriva y tener un rumbo preciso, un rumbo construido por todos, ilusionante y que nos haga crecer y ser mejores como comunidad.
Sólo falta que queramos hacerlo, y está en nuestra mano...
Hay muchas formas de hacerlo, hay muchas posibilidades. Seguro que podemos encontrar la forma.
Al menos, ésta es nuestra visión.
Estaríamos encantados de conocer la vuestra.
Gracias por seguirnos.
Ginés Marín Iniesta