Trasfondo n º 23
Senda sin salida entre la C/ Vereda y la acequia de Alguazas
Los caminos en Aljucer. Qué importantes, qué necesarios. Están ahí, y parece que han estado toda la vida, y, sin embargo, su existencia o no determina muchas cosas.
La historia de Aljucer se define por sus caminos, sus veredas y sus sendas, (que son otro tipo de caminos, más pequeños), pero que cumplen su función de unir y comunicar sitios, lugares y personas.
Ricardo ha elegido la foto de una senda que podría unir el casco antiguo de Aljucer con la zona de los dúplex que están junto a la piscina, pasando sobre la acequia de Alguazas, de una forma directa. Y sin embargo es una senda sin salida. La foto es ciertamente bonica, pues se puede percibir la vegetación, que bien ordenada y cuidada puede ser el entorno idóneo para un paso peatonal entre estas dos zonas del pueblo, aprovechando el cauce de la acequia, poniendo en valor nuestro paisaje y dando la posibilidad de unirnos.
Para nosotros, esta senda es un símbolo de lo que es Aljucer. De cómo somos los aljucereños y de nuestra propia historia. Y, como siempre, os queremos llevar más allá de la fotografía.
Los caminos, por si mismos, no unen nada si no se transitan. Si las gentes no deciden caminarlos.
El primer camino que marca la historia de Aljucer es el Camino Real de Cartagena, (en sentido este - oeste, Avenida de la Democracia, Calle de la Cruz, Plaza de la Cruz, Calle Escultor Roque López, Avenida de la Libertad, Plaza D. Juan Sáez Hurtado y Calle Mayor). Es la vía que ha configurado Aljucer como población.
Por este camino, cualquier persona que hizo el trayecto entre Murcia y Cartagena, hasta las últimas décadas del siglo XVIII, pasó por este camino, si siguió la ruta por el Puerto de la Cadena.
De hecho, no es casualidad que las casas con escudo, la iglesia y los lugares con mayor afluencia de público (molinos, ventorrillos, etc...), durante mucho tiempo estuvieran localizados a la orilla de este camino.
Fue la inauguración del nuevo Camino Real de Cartagena, en 1785, lo que supuso la menor afluencia de tráfico y de personas por el antiguo camino real, que perdió su nombre y fue renombrado como calles de Aljucer, adquiriendo nombres, en algunos casos, nacidos de esa época, como "Calle Mayor", "Calle Arriba", " Calle Abajo" o "Calle de la Cruz", o posteriormente, como "Avenida de la Libertad", "Avenida de la Democracia", o "Calle Escultor Roque López".
Fruto del nuevo camino, que nosotros conocemos como Carretera del Palmar, nació una nueva vía que conectaba el antiguo y el nuevo camino real, es la Calle Vereda, que, en sus orígenes, tendría, seguramente, que ser una senda o una vereda de paso de ganado y de personas.
De igual modo, el Camino del Salabosque, tal y como lo conocemos ahora, surge de la creación del Nuevo Camino Real de Cartagena, que une el antiguo camino a la altura del Molino del Porche con el nuevo y a su vez, éste con el antiguo Carril de Salabosque, cuyo inicio está en el también antiguo y todavía vigente Camino de Santa Catalina.
De hecho, la antigua vía que unía el Camino de Santa Catalina con la Alberca es el llamado, actualmente, Carril del Salabosque. Es curioso que, aunque con el mismo nombre, el camino más antiguo sea llamado, actualmente, Carril del Salabosque, mientras que el que nace de la Carretera del Palmar, reciba el nombre de Camino.
Es lógico que los caminos y el pueblo se fueran configurando en función de las necesidades y de los usos de las distintas épocas y circunstancias.
Los caminos han ido conformando el desarrollo urbano de Aljucer. Han ayudado a configurar el pueblo tal y como lo conocemos. En cierto modo, los que vivimos en Aljucer nos hemos relacionado en base a esta red de caminos que nos han hecho interpretar el entorno de una forma determinada y han marcado nuestra historia.
Volvemos, en este punto, a la foto, y a lo que significa. La foto es un símbolo de la poca planificación y del desinterés de integrar o conectar las diferentes realidades de Aljucer. Hablamos de urbanismo, pero sólo es una materialización de lo difícil que es para los aljucereños ponernos de acuerdo, tratar de integrar lo nuevo, lo diferente. Quizás tenga que ver con nuestro carácter huertano, quizás tenga que ver con el aislamiento que hemos vivido como pueblo debido a nuestra situación, quizás sólo sean elucubraciones de éstos que publican.
La historia está, la compartimos, y forma parte de lo que somos, el futuro está en nuestras manos. De todos depende qué tipo de pueblo queremos, cómo queremos relacionarnos, qué queremos como comunidad.
Los caminos sólo favorecen o perjudican estas relaciones, pues son frutos de la acción del hombre.
El camino de la foto es una barrera entre los aljucereños. Al menos así lo pensamos y estamos más por buscar los caminos que nos unen.
En fin, ahora es cosa tuya, ¿Cuál es tu opinión sobre ésto?
Gracias por seguirnos...
Ginés Marín Iniesta