Trasfondo n º 63:
Pablo, un niño aljucereño, haciendo su cruz de mayo en el Pantano de Aljucer.
Partimos de la foto, una imagen muy elocuente. Un niño, Pablo, haciendo su cruz de mayo. Esta foto es la síntesis de lo que queremos transmitiros con este trasfondo y que Ricardo, como siempre, ha sabido captar maravillosamente.
Un día o dos antes del 3 de mayo, el Día de la Cruz o también conocido como Día de la Invención de la Cruz, la Asociación Cultural PatrimoniAljucer, junto a algunos vecinos de la Plaza de la Cruz, desde hace unos ocho años, hacen un taller de cruces.
Un taller que trata de mantener la tradición de hacer cruces de mayo a la manera habitual que se ha tenido costumbre en la Huerta de Murcia.
Un niño, en la actualidad, haciendo la cruz es la concreción de que esta tradición aún no está muerta.
Muchos hemos tenido una cruz de mayo porque nuestras abuelas nos la hacían a primeros de mayo, o bien porque las colocaban en su fachada.
Con la cruz, lo que trataban era de alejar todo lo malo que se pudiera dar de la casa en cuya fachada se colocase. La cruz, como un símbolo divino, de protección.
La cruz, revestida de huerta, de aquello que nace en ella, y que en ella florece y da fruto. Una cruz huertana, que conecta con la vida cotidiana de las gentes huertanas. Una tradición enraizada profundamente en la vida sencilla de este rincón del mundo.
Y es que la cruz de mayo se hace con elementos que, aún hoy, podemos conseguir en la huerta.
Cañas con las que hacer la estructura de la cruz.
Ramas verdes que, en la primavera murciana abundan en los árboles que nos acompañan, y que nos sirven para revestir la cruz de verde, de vida, haciéndola frondosa, como un árbol.
Flores, para embellecerla y hacerla un canto a la vida, a la naturaleza.
En conjunto, un símbolo de la Pascua, de la Pascua Florida que le llamamos en Murcia.
Su hechura conecta con la fiesta religiosamente se celebraba en el calendario festivo de la Iglesia, la "Invención de la Santa Cruz".
Al ser una fiesta en declive, litúrgicamente hablando, el interés popular ha ido disminuyendo, llegando hasta nosotros por el uso de la costumbre.
Sin embargo, hacer una cruz de mayo, entronca con rituales paganos, anteriores a la difusión del Cristianismo, y que se vincula a ritos relacionados con la fecundidad, al igual que el canto de los mayos.
Volviendo a la actualidad, la fiesta de la Cruz se celebra el 3 de mayo y, por tanto, ese es el momento de hacer las cruces y colgarlas, en la fachada, en las calles...
Rito asociado a la cruz era bailar y cantar en los lugares en los que estuviera ubicada una cruz de mayo, pero no cantarle los mayos.
Por tanto, para nosotros, es un símbolo precioso de la cultura huertana, de la tradición y del momento en el que se celebra.
Al igual que en el trasfondo anterior, nuestro objetivo es, básicamente, didáctico, tratando de distinguir entre los ritos de los mayos y de la cruz.
Tenemos en nuestras manos hacer que estas Fiestas de la Cruz en Aljucer, de origen remoto, no se pierdan.
Creemos que este tipo de fiesta sencilla, de encuentro, vecinal, es el tipo de fiesta que necesitamos, en la que nos encontremos y podamos participar sin pertenecer a ningún grupo específico.
Ojalá podamos disfrutar de estas fiestas durante muchos más años.
Gracias por seguirnos.
Ginés Marín Iniesta